La enseñanza del idioma en la escuela extranjera es una parte muy importante, la parte didáctica se complementa con actividades extraescolares que los alumnos realizan en sus horas libres y durante los fines de semana: excursiones, deportes y visitas culturales, siempre acompañados de monitores tutores para garantizar la seguridad y tranquilidad de los padres.
Este aspecto genera mucho interés entre los padres, en este sentido hay que decir que las familias son seleccionadas cuidadosamente. El coordinador de la escuela conoce a la familia y mantiene una comunicación fluida y constante con cada familia anfitriona. Las familias suelen tener hijos de la edad del estudiante o bien menores de edad, esto hace que la integración del estudiante sea más rápida y sencilla. La familia ofrece al estudiante pensión completa de Lunes a Domingo, la principal comida en Irlanda es la cena. El lavado de la ropa está incluido dentro de los servicios que ofrece la familia. La escuela está bien comunicada con la casa de la familia, en ocasiones se puede ir caminando, en otras hay linea directa de bus o tren.
Todos los estudiantes están cubiertos por un seguro de salud y seguro de viaje que garantiza la total tranquilidad. En las salidas grupales hay un monitor bilingüe español-inglés que acompaña al grupo durante toda su estancia. Tanto alumnos como padres, tienen el teléfono del monitor para contactar en caso de emergencia. En caso de que surja algún contratiempo, con la familia, en la escuela, de salud o en otro ámbito, el monitor-tutor es parte fundamental en la resolución de las incidencias que puedan presentarse durante la estancia. Es importante informar de forma exacta al rellenar la ficha de inscripción del alumno, en particular en lo que se refiere a alérgias, enfermedades o necesidades dietéticas especiales.